Los dos atacantes dirigieron al conjunto rojiblanco hacia tres puntos vitales en su persecución de las plazas de Liga de Campeones ante un rival que prolongó sus preocupaciones en los encuentros como visitante, en los que aún no ha ganado este curso. No vence a domicilio desde el pasado 31 de enero.
De inicio, el Atlético solventó un comienzo incómodo, que arrancó con alta intensidad, buen ritmo, incontrolable en el centro del campo y sin protagonismo ofensivo en las dos porterías hasta la primera aparición de la pareja Kun Agüero-Diego Forlán, que recuperó su versión más trepidante e incisiva frente a Osasuna.
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